La sesión legislativa de Washington en 2024 concluyó el 8 de marzo. Los legisladores aprobaron cientos de proyectos de ley y agregaron alrededor de $2 mil millones en nuevos gastos al presupuesto 2023-25. Sin embargo, podemos aprender tanto sobre qué esperar en la próxima sesión observando los proyectos que no se aprobaron como los que sí lo hicieron.
Varias malas propuestas fracasaron simplemente porque este es un año electoral. El próximo año, los legisladores más extremos serán menos reacios a impulsar ideas impopulares porque no enfrentarán la reacción del público por casi dos años, momento en el que esperan ya no ser considerados responsables.
Con esos factores en mente, aquí hay cuatro malas ideas que los legisladores rechazaron este año, pero que probablemente reaparezcan en la sesión de 2025.
SB 5770 – Derogar el límite al impuesto predial aprobado por los votantes
El SB 5770 buscaba anular un límite al impuesto predial aprobado en 2001 que restringe los aumentos anuales en la recaudación del impuesto a no más del 1 % por año. Los líderes demócratas declararon al SB 5770 como una de sus “máximas prioridades,” mientras que los republicanos lo calificaron como “el peor proyecto de ley de la sesión.” Al final, los líderes reconocieron la fuerte reacción pública contra derogar esta popular limitación fiscal, y retiraron el proyecto de consideración.
HB 2114 – Imponer control de alquileres en todo el estado
Al inicio de la sesión, este proyecto parecía encaminado a ser aprobado fácilmente. Sin embargo, el lamentable historial del control de alquileres en otros estados destacó los daños económicos causados por los controles de precios impuestos por el estado y cómo perjudican el acceso a viviendas asequibles al reducir la oferta. El proyecto fue aprobado en la Cámara, pero murió más tarde en el Comité de Medios y Arbitrios del Senado.
HB 2030 – Permitir votar a presos en prisión
En una época de creciente preocupación por la integridad de los resultados electorales, introducir el llamado Acta de Libertad para Votar parecía particularmente inoportuno. Dada la respuesta pública, los líderes legislativos decidieron no avanzar con la medida. Sin embargo, los ocho patrocinadores del proyecto, todos de un mismo partido, probablemente no abandonen completamente la idea. Es probable que la propuesta de permitir votar a los presos regrese el próximo año.
SJM 8006 – Prohibir los seguros de salud privados
El Memorial Conjunto del Senado 8006 instaba al gobierno federal a prohibir los seguros privados de salud y requerir que todos los estadounidenses se unan a un programa socialista de atención médica “universal.” La medida murió en el Senado, pero, como una maleza resistente, esta idea altamente impopular reaparece año tras año. Espere que este paria perenne resurja nuevamente en 2025.
HB 2150 – Remover a Donald Trump de la boleta electoral
En una nota positiva, todos están de acuerdo en que un proyecto que fracasó no volverá. El HB 2150, presentado por los representantes demócratas Kristine Reeves, Steve Tharinger y Julia Reed, buscaba eliminar el nombre de Donald Trump de la boleta electoral en el estado de Washington. El proyecto fracasó, y es poco probable que Trump se postule nuevamente para un cargo después de este año.
Sin embargo, el rechazo del liderazgo al proyecto (lo enviaron a una muerte silenciosa en el Comité de Gobierno Estatal y Relaciones Tribales) destaca un área importante de acuerdo bipartidista. Casi todos los miembros de ambos partidos creen que los legisladores de un partido no deberían impedir que los residentes de Washington voten por el candidato presidencial del otro partido. Cualquier tema que logre un 98 % de acuerdo es un desarrollo bienvenido.
Ojalá este resultado positivo inspire esfuerzos adicionales para encontrar posiciones políticas en las que casi todos puedan estar de acuerdo.
En una era de fuerte acritud partidista y profunda división social, es importante buscar y construir puntos en común. El fracaso de proyectos de ley dañinos en la última sesión indica que tales áreas de respeto mutuo son posibles y están al alcance.
En lugar de impulsar malas propuestas que probablemente no lleguen a ningún lado, la mayoría de los votantes quieren que los legisladores trabajen juntos y logren resultados. Ese es un buen punto de partida para centrar el enfoque en proyectos constructivos basados en soluciones de sentido común que hagan de Washington un lugar mejor para todos.
